Es el lugar de nuestros hijos, en dónde ellos se sienten comodos, su espacio.
Cuando son pequeños, una buena opcion es que los niños compartan habitación con los hermanos. Pero a medida que crecen, los
niños mayores empiezan a luchar por su espacio, por lo que es recomendable que cada uno tenga su propia habitación. Si esto no fuera posible, lo mejor es lograr un ambiente para cada uno de ellos
en el mismo espacio. Así se sentiran cómodos en ese lugar compartido.
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